El proyecto ha pasado por distintas fases, primero diseñando una metodología de investigación para evaluar la escala del problema, entender cómo funciona, cómo los datos abiertos pueden contribuir a encontrar una solución y a idear recomendaciones para los países involucrados. En esta fase se realizaron varios talleres para obtener conocimiento de expertos en género y seguridad sobre el tema, así como el desarrollo de la primera versión del estándar, por parte de Gabriela Rodriguez. Con esta herramienta se realizaron talleres en Argentina y en Uruguay. Esta primera etapa fue apoyada por la Fundación Avina y IDRC.

 

Con el conocimiento y lecciones aprendidas, así como también con una guía para protocolizar procesos de identificación de femicidios, se comenzó una segunda fase del proyecto , con el apoyo del BID, que ha tenido como foco a un número de países de la región, entre ellos Honduras, Jamaica, Panamá, Ecuador y Paraguay. Esta nueva etapa cuenta con el apoyo de Hassel Fallas en la investigación de los países mencionados y en una nueva versión del Estándar de Datos de Femicidios.