Desde sus inicios, posiblemente alrededor de 2011-2012, mucho se ha hablado de la vibrante comunidad latinoamericana trabajando en las áreas de datos abiertos abiertos y tecnología cívica. A nivel comparado, América Latina es percibida como un lugar fértil para la innovación en éstas áreas, así como un lugar donde existe una discusión relativamente madura sobre este tema. Han existido otros estudios o relevamiento a nivel comparado en Estados Unidos y Europa, así como estudios de caso a nivel de América Latina, pero no un relevamiento amplio como el que presentamos aquíExploralat.am es una plataforma que permite entender mejor el mundo de los datos abiertos y la tecnología cívica en América Latina.

Poco sabíamos de quiénes eran, dónde estaban, cómo se conectaban entre sí y, específicamente, en qué trabajaban este grupo de organizaciones. Esto motivó el desarrollo de Exploralat.am. El proyecto, llevado adelante desde ILDA por Carla Bonina, Silvana Fumega y Fabrizio Scrollini, partió de un trabajo colaborativo con una serie de instituciones (ver sección créditos) para ayudar a identificar y tipificar los distintos actores que trabajan en el espacio de tecnología cívica y datos abiertos en América Latina. Esto llevó a dos estrategias de investigación: cualitativa y cuantitativa. Por un lado, buscamos ejemplos de distintas tipo de organizaciones o iniciativas que usen datos abiertos o hayan incorporado tecnología cívica para llevar adelante su misión. Así, encontramos casos que representan distintas “oleadas” en este espacio, desde organizaciones pioneras como DATA Uruguay hasta el novedoso trabajo de Dymaxion Lab en Argentina utilizando técnicas de Machine Learning. En total recolectamos 12 casos que proveen historias, inspiración y análisis en distintas áreas de acción

Por otro lado, buscamos construir una base de datos que diera cuenta de la cantidad de proyectos y organizaciones existentes en la región. Actualmente son aproximadamente 700. El número en sí mismo es interesante, así como la variedad de organizaciones y proyectos mapeados. En muchos casos aún resta obtener más información. Lo que sí queda claro es el grado de asociatividad que existe entre muchas de estas organizaciones y lo que configura una característica de este ecosistema. Las distintas redes que este grupo de organizaciones e individuos han generado durante el tiempo, parece explicar parcialmente la sostenibilidad de este ecosistema.

Una de las preguntas clásicas es acerca del impacto de este tipo de iniciativas a nivel económico, social o político. En este sentido, la perspectiva es importante. En el año 2010 solo había discusiones acerca de si ésta agenda de trabajo iba a seguir existiendo, o si simplemente se trataba de una moda pasajera. Casi 10 años después es bastante claro que han habido cuatro resultados claros:

Demostrativos: Muchas de los proyectos abrieron camino a demostrar que si se podían hacer cosas en la era digital, forzando a los gobiernos a tomar medidas para emularlos o reconocerlos. Este ha sido el caso luego de la aparición, desde sociedad civil, de muchos portales para canalizar pedidos de acceso a la información pública.

Endógenos: El avance de la publicación de datos permitió ser la infraestructura para que nuevas organizaciones -que siguen lógicas no tradicionales- emergieran tanto a nivel de prensa, sociedad civil y empresa. Estas organizaciones, en muchos casos, presentan estructuras más flexibles, con foco en productos y nichos determinados de acción y orientadas al mundo digital.

Económicos: Si bien existen estudios que buscan cuantificar cuánto realmente vale (o ha impactado) la agenda de la apertura de datos, lo que este estudio ha demostrado es que hay empresas que se han formado (y en algunos casos crecido exponencialmente) debido a la apertura de datos por parte de gobiernos.

Sociales y Cívicos: Dependiendo del caso y contexto, algunos proyectos han logrado impactar en visibilizar problemas complejos o bien en mejorar servicios públicos, en ambientes controlados.

Lo que es claro es que, salvo algunas excepciones, la replicación y escalabilidad no ha sido la constante de estos proyectos en la región aunque sí a inspiración en otros proyectos regionales. 

El futuro de este campo es aún incierto. Persisten desafíos para la sostenibilidad de este espacio pero en la medida que la conexión de esta comunidad de práctica es más fuerte, particularmente con quienes están al frente de resolver problemas complejos, es de esperar que sinergias positivas se desarrollen en el sector público. Por lo pronto, les invitamos a conocer esta herramienta y a mejorarla.

Créditos

Este proyecto fue desarrollado por ILDA con el apoyo de la Fundación Avina y el Banco Interamericano de Desarrollo en colaboración la fundación Luminate y el programa OD4D (IDRC). El sitio ha sido desarrollado por Datasketch.